domingo, 13 de octubre de 2013

Es mejor caer solo a que te mate la certeza

El decir la verdad parece que cada vez es menos común y molesta más.
Preferimos ocultar lo que pensamos, pasar y pasar hasta que el vaso se llena y ya no podemos aguantar nada más. A partir de ahí surgen los enfados, los malos entendidos.
Pero, ¿no es mejor que alguien nos diga lo que le molesta o transmitir nosotros nuestra opinión?
Pues no. Eso no se lleva. Si haces algo mal muchos lo criticarán pero nadie tratará que mejores, nadie dará consejo con lo que tendrás que caer solo y levantarte del mismo modo.
Al igual que son importantes los te quiero también lo son las verdades.
Saber aceptar una crítica es tanto o más importante que saber digerir un piropo. Pero si no nos acostumbran a ellas siempre les tendremos miedo y crearemos una especie de coraza cada vez que nos bombardeen con verdades no agradables al oído.
Seamos realistas con los demás y por supuesto con nosotros mismos. Ante todo con nosotros.





Mintamos menos, sonriamos más.

Vamos a contar verdades

No hay comentarios:

Publicar un comentario